Os presentamos el fotolibro Friction de la fotógrafa holandesa Margaret Lansink. Una coedición de the(M) éditions e IBASHO, formada por imágenes estéticas, poéticas y ligeramente minimalistas que tienen como protagonista el paisaje. Concretamente, el diálogo que se establece entre la naturaleza desértica del Valle de la Muerte en Estados Unidos y el paisaje que genera el cuerpo de diferentes bailarinas de ballet profesionales retratadas por la artista.
Nuestra colaboradora Isabel Hernández nos recomienda, este mes de marzo, el fotolibro Friction de la fotógrafa holandesa Margaret Lansink, cuya obra ha sido premiada en numerosas ocasiones.
Lansink utiliza la fotografía intuitiva para crear imágenes que reflejan abierta y honestamente sus emociones, dudas, reflexiones y luchas internas. Sus imágenes son como autorretratos que revelan las emociones internas de la artista en un momento y lugar determinados.
El estilo único y reconocible de Lansink invita a los espectadores a explorar su propia red de recuerdos, emociones, expectativas, miedos y deseos. Sus imágenes construyen un puente entre lo físico y lo metafórico, y cada serie de imágenes se basa en un proceso humano de aceptación de la vida tal como es.
© Margaret Lansink.
En su último trabajo publicado bajo el título Friction, Lansink celebra la belleza de la imperfección y la impermanencia, siguiendo la filosofía japonesa del Wabi Sabi e intenta comprender por qué los seres humanos nos negamos a menudo a aceptar la simple noción de impermanencia. Una aceptación, que según la artista, nos permite acceder a la Belleza: la belleza de las ideas, de las relaciones humanas o de nuestros vínculos con la naturaleza. Vínculos que quedan reflejados en las noventa páginas que componen este magnífico fotolibro.
Reseña del fotolibro Friction
Saber abrazar el cambio es como pasar la página de un libro sin temor alguno, un gesto tan sencillo como este participa del sentido del tacto, que es el único capaz de iniciar un diálogo real entre nuestro cuerpo y el espacio. Un diálogo que nos recuerda que nuestra propia existencia es un devenir que nos hace estar en contacto con una superficie ajena a nuestra piel, pero en la que buscamos reafirmarnos cada día. Después de todo, somos aquello que participa de la erosión, ese material que se desprende de nosotros en contacto con el mundo, esa fricción, nos reivindica, recordándonos algo que es evidente en nuestro cuerpo físico, pero que también conecta a un nivel más profundo con el concepto de impermanencia. Nada es para siempre y tal vez la fotografía tenga un peso importante en esta reflexión, porque no se trata de capturar para la eternidad, sino de aceptar la fugacidad como parte natural de nuestra vida. Cuando contemplamos una fotografía, cuando nos detenemos en ella, estamos observando algo irrepetible, como si nos entregaran un regalo que ha sido capaz de alcanzarnos gracias a la mirada de otro.
Friction de la fotógrafa holandesa Margaret Lansink, yuxtapone con una delicada cadencia de imágenes dos paisajes complejos. Por un lado, fotografía la naturaleza desértica y hermosa que se encuentra en lugares como el Valle de la Muerte en Estados Unidos, donde el tiempo parece no jugar un papel aparente o parece medirse con una amplitud que nos supera; y lo hace dialogar con el paisaje que genera el cuerpo humano, fotografiando a bailarinas de ballet profesionales que tuvieron que retirarse a los 35 años.
En este libro el diseño es como los arreglos en una partitura, hacen que la música emerja de las imágenes y permiten no solo realizar una lectura unidireccional, sino que establecen silencios que ayudan a matizar los sonidos provocados por el contacto de dos paisajes que están danzando por el simple deseo de encontrarse. Los humanos, alejados de nuestro origen, debemos volver a conectar con la tierra que pisamos y los ritmos que son anteriores a nosotros. Es ahí donde reside el equilibrio que nos falta. Este libro coeditado por The (M) editions e IBASHO, es una experiencia que va más allá de lo fotográfico porque sus imágenes trascienden cualquier espacio físico, generando en nosotros la necesidad de ser verdaderamente libres.
Aquello que está por suceder, que es inevitable y aun así rechazamos, nos causa una herida interior que nos lastra y que nos impide comprender que la incertidumbre y lo desconocido no son amenazas, sino puertas que nos darán acceso a una nueva significación de la belleza.
Isabel Hernández.
Friction.
The(M) éditions e IBASHO, 2022.
Tamaño: 23,4 x 31,2 cm.
Número de páginas: 90.
Fotografías y texto: Margaret Lansink.
Diseño: Studio Des Signes.
Encuadernación: rústica.
Edición limitada de 600 ejemplares numerados y 50 ejemplares de cabecera con una impresión (a elegir entre 10 imágenes diferentes).
Para finalizar, os recomendamos que visitéis su web para disfrutar de sus otros seis libros publicados, tres de ellos hechos a mano por ella misma: The Kindness of One, galardonado con el Best Dutch Book Designs 2019, así como Borders of Nothingness – On the Mend y de The Kindness on One, los cuales forman parte de la colección del Victoria and Albert Museum de Londres.
Datos de interés:
Sitio web de Margaret Lansink.
Perfil de Instagram de Margaret Lansink.